Los tres eran seglares, y estaban presos por su fe. En la cárcel, cada uno de ellos intentó persuadir de la fe católica a un ministro protestante que, por una causa que desconocemos, también estaba preso, y los delató. Así que de la presunción de ser creyentes católicos se pasó a acusarlos de delito de «alta traición», como lo era el intentar convertir a la fe católica. Fueron beatificados el 22 de noviembre de 1987 por el papa Juan Pablo II, y éstos son sus datos:
-Jorge Errington era natural de Herst en Northumberland. Antes de su último proceso había tenido experiencia de la persecución. A comienzos de junio de 1585 fue arrestado y llevado a la Torre de Londres. Se le interrogó el 30 de agosto y él reconoció ser católico, pero dijo que rezaba por la reina y que la servía lealmente pero que su conciencia no le permitía ir a la iglesia protestante. En noviembre, según parece, se le puso en libertad. En 1591 fue nuevamente arrestado y esta vez detenido en York. En mayo de ese año pasó por tres interrogatorios. Pudo escaparse luego del castillo de York. En otoño de 1593 fue nuevamente arrestado y en julio de 1594 enviado, junto con san Juan Boste, a Durham, pero al no ser procesado fue enviado al castillo de York. Aquí encontró al ministro protestante que lo denunció finalmente.
-Guillermo Gibson era un rico labrador, natural de Ripon. Se sabe de él que estuvo muchos años preso en el castillo de York, y todos debieron admirar en él su bondad y su paciencia. La denuncia del citado ministro protestante lo llevó a la muerte.
-Guillermo Knight, joven de 23 años, era hijo de Leonardo Knight, labrador de South Duffield. Al llegar a la mayoría de edad le pidió a un tío suyo que le diera su herencia, y el tío para evitar dársela lo acusó de católico y consiguió que lo mandaran al castillo de York, donde consta que ya estaba el 5 de octubre de 1593. A los cinco días de estar con los presos comunes pidió poder estar con los presos católicos. Pasó tres años en la cárcel hasta la acusación del citado ministro protestante.