Originario de España, habría sido consagrado obispo en Roma por el papa san Martín I, hacia el 649, y enviado enseguida a gobernar la diócesis de Puy-en-Velay. Después de haberse ocupado y trabajado mucho en la conversión de los herejes arrianos (que negaban la divinidad de Jesús) y elvidianos (que negaban la virginidad de María), de retorno de una misión en Roma, fue capturado por paganos que lo mataron decapitándolo en Chiniac (Vivarais): este pueblo posteriormente fue llamado Saint-Agrève, en recuerdo del santo.
Dolcidio, su sucesor en la sede episcopal, hizo trasladar sus restos a Puy para depositarlos en la iglesia local de San Esteban, y más tarde fueron trasladadas a la Colegiata de Saint-Agrève, donde el 6 de abril de 1522 se procedio a su reconocimiento. Fueron profanadas por la Revolución, por lo que apenas sobrevivió un fragmento de craneo que se conserva en la catedral de Le Puy.
Traducido para ETF de un artículo de Gérard Mathon en Enciclopedia dei Santi. Debe notarse que la cronología episcopal de esta sede es harto imprecisa, y bien pudiera ser que nuestro santo no haya llegado a ser propiamente obispo del lugar; ver Duchesne, Fastes Episcopaux, II, pág 55ss.