Parece que murió allí mismo un 13 de febrero, día en que se celebra su fiesta. El 11 de noviembre del 836, el arzobispo de Tréveris trasladó el cuerpo de Cástor a Coblenza, a un monasterio edificado por el propio santo; al día siguiente consagró la iglesia en su honor, y allí colocó sus restos, que el 19 de noviembre fueron honrados por el emperador Luis el Piadoso.
Traducido de la berve reseña de Alfonso Codaghengo en Enciclopedia dei santi.