El canónigo Marcos Crispín (Kórósy) pertenecía a una familia distinguida de Croacia, había nacido en 1588. Después de terminar sus estudios en el Colegio Germánico de Roma, regresó a su país para desarrollar sus labores sacerdotales y, bajo el gobierno del arzobispo Pazmany, primado de Hungría, desempeñó tareas muy importantes en la arquidiócesis de Esztergom. Los otros dos mártires eran sacerdotes de la Compañía de Jesús: Esteban Poncracz, húngaro, nacido en 1582, y Melchor Crodecz, que era checo, nacido en 1584.
En 1619, cuando los tres sacerdotes estaban empeñados en sus trabajos apostólicos y de educación en la región de Kaschau o Kassa (ahora la ciudad de Kosice en Eslovaquia), un grupo de soldados al mando de Jorge Racoczy y por instigación del dirigente calvinista Belén Gsbor, invadieron el distrito, se apoderaron de los tres sacerdotes, que tenían gran influencia entre la población, los torturaron durante toda la noche y luego los mataron con lujo de crueldad y de barbarie. Estos mártires fueron beatificados en 1905 y canonizados por SS Juan Pablo II el 2 de julio de 1995.
En el sitio del Vaticano se hallan, en italiano, biografías más detalladas de los tres santos (Marcos, Esteban y Melchor).